El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha ofrecido a Estados Unidos la posibilidad de albergar a criminales capturados en el país norteamericano, incluidos ciudadanos estadounidenses. Este acuerdo fue anunciado durante la visita del secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, quien calificó la oferta como "sin precedentes" y "extraordinaria".
La propuesta de Bukele contempla recibir a "criminales convictos" de cualquier nacionalidad en el Centro de Confinamiento para el Terrorismo (CECOT), una megacárcel con capacidad para 40,000 reos. Actualmente, este centro alberga a más de 20,000 miembros de pandillas como la Mara Salvatrucha 13 y el Barrio 18.
El mandatario salvadoreño indicó que se cobraría una tarifa por el alojamiento de estos criminales, describiéndola como "relativamente baja para EE. UU., pero significativa para nosotros". Este ingreso ayudaría a hacer sostenible el sistema penitenciario salvadoreño, que enfrenta serios desafíos.
El Salvador tiene la tasa de encarcelamiento más alta del mundo, con 1,659 prisioneros por cada 100,000 habitantes, una cifra que duplica a la tasa de Cuba, que es de 794 prisioneros por cada 100,000 habitantes. Sin embargo, las condiciones de las prisiones en el país centroamericano son descritas como "duras y peligrosas" por el Departamento de Estado de EE. UU., señalando deficiencias en saneamiento, agua potable, ventilación y control de temperatura.
Asimismo, organismos de derechos humanos han denunciado más de 3,000 detenciones injustificadas y más de 300 muertes de reos sin juzgar desde que Bukele implementó un régimen de excepción en 2022, el cual ha resultado en la captura de más de 80,000 personas.
En el ámbito político, Rubio destacó que Bukele está dispuesto a aceptar a ciudadanos salvadoreños y a otros inmigrantes ilegales considerados peligrosos, como miembros de pandillas latinoamericanas. No obstante, cualquier intento de deportar a ciudadanos estadounidenses podría enfrentar desafíos legales significativos y suscitar debates en Washington.
Paralelamente, Bukele y Rubio firmaron un Memorando de Entendimiento sobre Cooperación Nuclear Civil Estratégica. Este acuerdo busca impulsar el desarrollo de energía nuclear en El Salvador y fortalecer la cooperación bilateral en este sector clave.
Este acuerdo se desarrolla en un contexto en el que la administración de Trump ha intensificado la represión de la inmigración y ha priorizado la deportación de inmigrantes indocumentados, además de fomentar la aceptación de deportados por parte de otros países. La propuesta de Bukele podría tener implicaciones significativas para la región y la gestión de la criminalidad transnacional.