El estudio, realizado a partir de una base de datos de 500,000 registros médicos de una población de 450,000 personas, identificó 22 vínculos específicos entre infecciones virales y enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer y Parkinson. Los investigadores encontraron que las personas tratadas por encefalitis viral tienen 31 veces más probabilidades de desarrollar Alzheimer. De 406 casos de encefalitis viral analizados, 24 de ellos, aproximadamente el 6%, desarrollaron Alzheimer.
Además, se observó que aquellos hospitalizados debido a neumonía, tras una infección gripal, presentaron una mayor susceptibilidad a padecimientos como Alzheimer, demencia, Parkinson y esclerosis lateral amiotrófica (ELA). El estudio también reveló que las infecciones intestinales, la meningitis y el virus varicela-zóster están relacionados con varias enfermedades neurodegenerativas.
Una característica alarmante del estudio es que los efectos de las infecciones virales en el cerebro pueden durar hasta 15 años, sin evidencia de que la exposición a los virus proporcione algún efecto protector. Alrededor del 80% de los virus implicados en enfermedades cerebrales son neurotróficos, lo que significa que tienen la capacidad de cruzar la barrera hematoencefálica.
En el contexto de la prevención, los investigadores indicaron que vacunas disponibles para la gripe, el virus varicela-zóster y la neumonía pueden no prevenir todos los casos de enfermedad, pero sí reducir drásticamente las tasas de hospitalización. Esto sugiere que la vacunación podría disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades neurodegenerativas.
El estudio tomó como punto de partida registros de 35,000 finlandeses con seis tipos diferentes de enfermedades neurodegenerativas, los cuales fueron comparados con un grupo de 310,000 controles sin enfermedades cerebrales. Este análisis inicial arrojó 45 vínculos entre la exposición viral y enfermedades neurodegenerativas, los cuales fueron refinados a 22 vínculos mediante el análisis de 100,000 registros médicos del Biobanco del Reino Unido.
En un esfuerzo previo, un estudio de más de 10 millones de personas había asociado el virus de Epstein-Barr con un riesgo 32 veces mayor de esclerosis múltiple, subrayando la creciente evidencia de que la inflamación en el sistema nervioso central por infecciones virales podría ser un factor de riesgo común y evitable para estos trastornos.
A pesar de ser un estudio observacional que no prueba una relación causal, los hallazgos presentados en la revista Neuron brindan nuevas perspectivas sobre cómo las infecciones virales pueden influir en el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas.