Nvidia ha dado a conocer sus resultados financieros del segundo trimestre de 2024, destacando ingresos récord de US$ 30 mil millones, un aumento notable del 122% en comparación con el mismo periodo del año anterior, superando las expectativas de los analistas que fijaban los ingresos en US$ 28.7 mil millones. Este crecimiento de tres dígitos ha sido sostenido por cuatro trimestres consecutivos.
Sin embargo, a pesar de estos resultados positivos, las acciones de Nvidia cayeron un 6% en el comercio después de horas y un 3.4% durante el comercio regular en el Nasdaq. Esta caída en las acciones ha llevado a una pérdida de más de $100 mil millones en valor de mercado, situándose ahora en aproximadamente US$ 3.1 billones. La empresa representa cerca del 6% del índice S&P 500, influyendo así en su rendimiento general.
En cuanto a las expectativas futuras, Nvidia proyecta ingresos de US$ 32.5 mil millones para el tercer trimestre, lo que implicaría un aumento del 80% interanual, pero muestra una desaceleración en comparación con el segundo trimestre. Se espera que los márgenes brutos se mantengan en el rango medio del 70%, por debajo del margen del 76.4% esperado por los analistas.
La compañía también enfrenta problemas de producción con su próximo chip de inteligencia artificial, conocido como Blackwell, que contiene 208 mil millones de transistores. Esta entrega, que se ha retrasado varios meses desde enero, ha sido abordada por TSMC, el fabricante de semiconductores responsable de su producción.
La caída en el precio de las acciones de Nvidia ha tenido un impacto en otras empresas tecnológicas y fabricantes de semiconductores, incluyendo a Samsung y TSMC. A pesar de esta caída, las acciones de Nvidia han aumentado más del 150% en lo que va del año y más del 750% desde principios de 2023.
Analistas han señalado que, aunque Nvidia ha superado las expectativas, la magnitud de la superación no fue suficiente para satisfacer las altas expectativas del mercado, generando preocupación sobre una posible desaceleración en su crecimiento, lo que ha intensificado la cautela entre los inversores.
La fluctuación del precio de las acciones y los problemas con la producción del chip Blackwell son desafíos a corto plazo, frente a un contexto de expectativas altísimas por parte del mercado financiero y los inversores que siguen de cerca el rendimiento y futuro de Nvidia. El chip Blackwell de Nvidia, que enfrenta retrasos en su entrega, contiene un asombroso número de 208 mil millones de transistores, destacándose como uno de los desarrollos tecnológicos más avanzados en el campo de la inteligencia artificial.