El asteroide 2024 YR4, con un tamaño estimado de entre 40 y 100 metros (130 a 328 pies), acapara la atención de científicos alrededor del mundo al registrar una probabilidad del 3.1% de impacto con la Tierra. Este nivel de riesgo, equivalente a 1 en 32, es el más alto jamás registrado para un objeto de su tamaño o mayor. Según la NASA, la fecha potencial de colisión sería el 22 de diciembre de 2032.
El objeto celeste fue detectado por primera vez el 27 de diciembre de 2024 por el Observatorio El Sauce en Chile. Hasta el momento, el análisis de su composición indica características típicas, sin presencia significativa de metales raros. La comunidad científica sigue monitoreando su trayectoria para reevaluar su riesgo de impacto.
Desde su descubrimiento, la probabilidad estimada de colisión del 2024 YR4 ha experimentado variaciones. Inicialmente fue del 1%, pero revisiones posteriores la elevaron al 3.1%. Por su parte, la Agencia Espacial Europea (ESA) arroja una evaluación ligeramente menor, estimando un 2.8%. Nuevas observaciones realizadas el 19 de febrero de 2025 provocaron una reducción temporal en la probabilidad de impacto a 1.5%, aunque la cifra podría cambiar nuevamente con datos adicionales.
El trayecto proyectado del asteroide cruza regiones densamente pobladas del planeta, abarcando áreas desde el océano Pacífico hasta el sur de Asia. Poblaciones en ciudades como Bogotá (Colombia), Lagos (Nigeria) y Mumbai (India) se encuentran en la posible línea de impacto, lo que incrementa el nivel de preocupación por sus efectos potenciales.
En términos de energía, una hipotética colisión del 2024 YR4 con la Tierra liberaría una cantidad equivalente a ocho megatones de TNT, más de 500 veces el poder destructivo de la bomba de Hiroshima. Un impacto de esta magnitud podría generar cráteres considerables, dependiendo de si el asteroide alcanza el extremo superior de su tamaño estimado.
El seguimiento próximo al asteroide incluye observaciones programadas con el Telescopio Espacial James Webb en marzo de 2025, lo que permitirá afinar los cálculos sobre su trayectoria y riesgo final de colisión. Los expertos hacen énfasis en la incertidumbre que aún rodea la ruta exacta del objeto, indicando que nuevas evaluaciones podrían disminuir aún más la probabilidad de impacto.
A pesar del nivel de riesgo inicialmente reportado y su posible devastación, las autoridades científicas solicitan a la población mantener la calma y confían en que los análisis y herramientas de monitoreo seguirán agotando todas las posibilidades para prever y mitigar cualquier peligro potencial. El asteroide 2024 YR4 es considerado un objeto potencialmente peligroso debido a su capacidad destructiva, aunque su tamaño es significativamente menor al asteroide que acabó con los dinosaurios, que se estima habría medido unos 10 kilómetros.