Un estudio publicado en ACS Food Science & Technology ha demostrado que la sustitución parcial de la harina de trigo por harina de cáscara de plátano (BPF) en galletas mejora significativamente las propiedades nutricionales y antioxidantes de los productos sin afectar negativamente su sabor ni textura. Las proporciones de sustitución incluyeron 7.5%, 10%, 12.5% y 15%, y las galletas resultantes fueron comparadas con galletas tradicionales sin BPF.

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Propiedades Nutricionales y Beneficios: Al añadir harina de cáscara de plátano, las galletas enriquecidas mostraron aumentos significativos en fibra, magnesio, potasio y antioxidantes, esenciales para la salud humana. Estas galletas aportaron un mayor contenido de minerales y compuestos que combaten el cáncer, ofreciendo una opción más nutritiva que las galletas tradicionales de harina de trigo. Aunque agregar más del 15% de BPF hizo que las galletas fueran algo más duras y marrones, las galletas con un 7.5% de BPF lograron un equilibrio ideal entre sabor y textura.

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Propiedades Físicas y Durabilidad:Los consumidores que probaron estas galletas no notaron diferencias significativas en sabor respecto a las galletas sin BPF, lo que indica que la incorporación de cáscara de plátano no afectó negativamente la calidad gustativa. Además, las galletas enriquecidas con BPF tuvieron una vida útil extendida, conservándose en buen estado durante tres meses a temperatura ambiente.

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Uso de la Harina de Cáscara de Plátano en la Alimentación Sostenible:Este tipo de sustitución de la harina tradicional no solo mejora el valor nutricional de los alimentos, sino que también ayuda a reducir el desperdicio alimentario. Alrededor del 40% del peso de un plátano corresponde a su cáscara, que generalmente es desechada. Sin embargo, la investigación sugiere que la cáscara, tras ser blanqueada, secada y convertida en harina, puede ser aprovechada en una variedad de productos horneados como panes, pasteles e incluso pastas, contribuyendo a una alimentación más sostenible y nutritiva.

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Más allá de los productos horneados, la cáscara de plátano también se ha utilizado en la cocina creativa, como en el famoso curry de Nigella Lawson y en el "tocino de cáscara de plátano", popularizado por bloggers veganos. Estas alternativas muestran el potencial culinario de un ingrediente que normalmente sería considerado desecho.

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Este estudio sugiere que el uso de cáscara de plátano podría ser una solución nutritiva y ecológica, ayudando tanto a la salud humana como a la reducción del desperdicio alimentario.