El 6 de agosto de 2024, la plataforma de redes sociales X, propiedad de Elon Musk, presentó una demanda federal en Texas contra la World Federation of Advertisers (WFA) y varias empresas de alto perfil, incluyendo Unilever, Mars y CVS Health. La demanda acusa a estas entidades de conspirar para boicotear la plataforma, resultando en la pérdida de "miles de millones de dólares" en ingresos publicitarios.
La demanda detalla que los anunciantes, a través de la iniciativa de la WFA llamada Global Alliance for Responsible Media (GARM), actuaron de manera concertada para retener ingresos publicitarios, lo cual, según X, viola la ley antimonopolio de EE. UU. Desde la adquisición de la plataforma por Musk en 2022, los ingresos publicitarios de X han disminuido dramáticamente, proyectándose aproximadamente $2 mil millones para 2024, comparados con los $4.5 mil millones alcanzados en 2021.
Elon Musk expresó su frustración en Twitter: "Intentamos la paz durante 2 años, ahora es guerra". Según la demanda, el supuesto boicot ha hecho que X sea un competidor menos efectivo en la venta de publicidad digital.
La iniciativa GARM, creada en 2019, busca establecer estándares de seguridad de marca en la publicidad digital. Sin embargo, X alega que GARM usó su influencia para discriminar injustamente a la plataforma, lo que condujo al boicot publicitario. La situación se ha visto exacerbada por un aumento documentado en el contenido antisemita en X tras la adquisición de Musk, lo que ha provocado cautela entre los anunciantes.
Linda Yaccarino, CEO de X, también se pronunció al respecto, calificando el comportamiento de GARM como un "estigma" para la industria publicitaria que no debe continuar.
X ha solicitado daños no especificados y una orden judicial para detener cualquier esfuerzo continuo de conspirar para retener ingresos publicitarios. La demanda subraya que las acciones de GARM no solo perjudicaron a X, sino que también fueron contrarias a los intereses económicos de los propios anunciantes, sugiriendo que dichas acciones solo tenían sentido dentro del contexto de una conspiración.
Esta demanda se enmarca en un contexto de creciente tensión entre las plataformas de medios y los anunciantes, donde las prácticas de GARM han cobrado especial relevancia por su impacto en la libertad de expresión y el acceso a la publicidad. No es la primera acción legal emprendida por X; la plataforma también ha demandado a Media Matters por difamación, con un juicio programado para abril de 2025. Desde su fundación, GARM ha trabajado con varias plataformas digitales para mejorar los estándares de seguridad de marca, pero esta es la primera vez que una plataforma de alto perfil acusa a la iniciativa de favorecer ciertos espacios publicitarios sobre otros.