El mercado bursátil estadounidense mostró un claro repunte el viernes después de que Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, reafirmara la solidez de la economía nacional en sus recientes declaraciones. Sus palabras arrojaron calma a unos mercados que habían iniciado la jornada con una notable caída. El índice S&P 500, inicialmente afectado por una baja superior al 1%, logró revertir la tendencia, cerrando con un incremento del 0.6% y alcanzando un nivel de 4,100 puntos a las 15:29 horas en Nueva York.
Además del S&P 500, otros índices bursátiles también mostraron señales de recuperación. El Nasdaq 100 observó un alza del 0.7%, mientras que el Dow Jones subió un 0.6%. Paralelamente, el índice MSCI World ganó un 0.2%, el Bloomberg Magnificent 7 Total Return Index se incrementó en un 0.1% y el índice Russell 2000 registró un aumento del 0.7%.
En cuanto al mercado de divisas, el índice Bloomberg del dólar al contado presentó una ligera caída del 0.2%. Entre las principales monedas, el euro incrementó su valor en un 0.6%, alcanzando los 1.0846 USD, mientras que la libra esterlina subió un 0.3%, cotizándose en 1.2925 USD. Por otro lado, el yen japonés se situó en 148.01 por dólar.
Las criptomonedas no escaparon a la volatilidad de la jornada. Bitcoin sufrió una caída del 1.8%, cotizándose en 87,551.82 USD, mientras que el éter disminuyó un 1.3%, llegando a un valor de 2,169.84 USD.
El mercado de bonos también vivió movimientos considerables. Los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años se incrementaron en cuatro puntos básicos, situándose en 4.31%. Mientras tanto, los bonos alemanes a 10 años mantuvieron su rentabilidad en 2.84%, y los bonos del Reino Unido, con el mismo vencimiento, vieron una disminución de dos puntos básicos, situándose en 4.64%.
En el terreno de las materias primas, el crudo West Texas Intermediate experimentó un alza del 1.1%, alcanzando los 67.09 USD por barril. Por otro lado, el oro al contado mostró un ligero descenso del 0.2%, situándose en 2,905.05 USD la onza.
La recuperación de los mercados no fue inmediata. Durante la semana, el S&P 500 atravesó una fase volátil, llegando incluso a caer por debajo de su media móvil de 200 días, un nivel técnico crucial observado por los analistas. Sin embargo, las declaraciones de Powell, al reiterar que las tasas de interés no se recortarán pronto, resultaron claves para devolver la confianza a los inversores.
El impacto de las declaraciones del presidente de la Reserva Federal y las subsecuentes reacciones del mercado reflejan la sensibilidad actual de las bolsas a los mensajes sobre política monetaria y estabilidad económica. La jornada dejó en claro que las perspectivas macroeconómicas siguen pesando considerablemente en las decisiones del mercado financiero global.
El índice S&P 500, uno de los principales referentes del mercado bursátil mundial, tiene más de 66 años de historia, al haber sido introducido oficialmente en 1957 como un termómetro de la economía de Estados Unidos, compuesto actualmente por 500 de las empresas más grandes del país.