El 30 de octubre de 2024 a las 7:10 AM hora local, Corea del Norte llevó a cabo el lanzamiento de un misil balístico intercontinental (ICBM) desde las inmediaciones de Pyongyang. El ICBM alcanzó una altitud récord de 7.000 km y voló durante 86 minutos antes de caer en el mar a aproximadamente 200 millas al oeste de la isla Okushiri en Japón, a las 8:36 AM. Este evento ha generado significativas reacciones internacionales y ha incrementado las tensiones en la región del Pacífico.
El líder norcoreano, Kim Jong-un, estuvo presente durante el lanzamiento y calificó esta acción como una "acción militar apropiada" en respuesta a lo que considera amenazas de Estados Unidos y sus aliados. Este lanzamiento representa el primer uso de un ICBM por parte de Corea del Norte desde diciembre de 2023, cuando se probó el Hwasong-18. Además, se estima que alrededor de 10,000 tropas norcoreanas han sido enviadas a Rusia, lo que suscita preocupación entre EE. UU. y sus aliados sobre la posible implicación de estas fuerzas en el conflicto en Ucrania.
El ministro de Defensa japonés, Gen Nakatani, subrayó que el misil voló más alto y durante un periodo más largo que cualquier otro lanzamiento previo. Por su parte, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE. UU., Sean Savett, criticó el lanzamiento, señalando que Corea del Norte parece priorizar su programa de armas de destrucción masiva sobre el bienestar de su población. Corea del Sur, en respuesta, anunció controles de exportación sobre 15 materiales necesarios para la producción de misiles de combustible sólido, los cuales son más avanzados tecnológicamente que los de combustible líquido.
Este lanzamiento se produce en un contexto de creciente tensión en la región, exacerbada por los recientes ejercicios militares conjuntos entre EE. UU., Japón y Corea del Sur. Expertos en defensa sugieren que Corea del Norte podría estar preparando un séptimo ensayo nuclear, dado el aumento de sus actividades militares.
Las autoridades internacionales continúan monitoreando de cerca la situación, subrayando la necesidad de mantener la estabilidad y la seguridad en la región del Pacífico, frente a las continuas provocaciones de Corea del Norte. El misil lanzado alcanzó una altitud que es casi 14 veces mayor que la órbita de la Estación Espacial Internacional, lo que destaca el significativo avance tecnológico en las capacidades de Corea del Norte en la producción de misiles balísticos intercontinentales.