Temu y Shein anunciaron que aplicarán incrementos de precios a clientes estadounidenses desde el 25 de abril de 2025, citando como principal causa la imposición de aranceles de hasta el 145% sobre productos importados desde China. A este ajuste se sumará la eliminación, a partir del 2 de mayo de 2025, de la exención “de minimis”, beneficio que permitía la importación libre de impuestos de paquetes valorados en menos de $800. Estas medidas afectan directamente a los costos de importación de ambas plataformas, incrementando sus gastos operativos y obligando a revisar sus estructuras de precios para proteger la rentabilidad sin reducir la calidad de sus productos.
Fuentes oficiales de las compañías han comunicado que los cambios en la política comercial estadounidense han elevado considerablemente los costos de operación, forzando a ambas empresas a replantear sus estrategias tanto en fijación de precios como en inversión publicitaria. En las dos semanas previas al 13 de abril de 2025, Temu redujo su promedio diario de gasto publicitario en Estados Unidos en un 31% respecto al mes anterior, abarcando plataformas clave como Facebook, Instagram, TikTok, Snap, X y YouTube. Por su parte, Shein ajustó su presupuesto en un 19% durante el mismo periodo y en los mismos canales, además de una notable disminución de la presencia de Temu en Google Shopping desde el 12 de abril de acuerdo con datos de Tinuiti.
La subida de precios afecta una amplia gama de productos, incluyendo ropa, accesorios y artículos electrónicos. La eliminación de la exención aduanera y la imposición de nuevas tarifas resultan en un incremento significativo para los consumidores estadounidenses, quienes ahora deberán afrontar costos adicionales en sus compras a estas plataformas.
El impacto de los nuevos aranceles trasciende las empresas chinas. Otras compañías, como Nintendo, han anunciado ajustes de precio en los accesorios de su próxima consola Switch 2, mientras que Best Buy y Ferrari también modificaron precios de sus productos a consecuencia de este entorno arancelario globalizado.
Según datos del sector, las políticas impulsadas por la administración Trump están generando un entorno de incremento generalizado de los costos de importación. Se estima que la tarifa arancelaria general del 10% afecta a prácticamente todos los productos importados en Estados Unidos, sumándose a gravámenes específicos que repercuten en diversos sectores industriales y comerciales. Estos cambios llevan a los minoristas a ajustar sus estrategias de mercado, revisando tanto precios finales como campañas publicitarias ante los nuevos desafíos económicos.
El entorno económico y regulatorio resultante ha llevado a un alza inmediata en los precios al consumidor, afectando de manera transversal a múltiples industrias e incidiendo de forma directa en la competencia y accesibilidad de productos importados para el público estadounidense.