El 20 de enero de 2025, el equipo de científicos del Experimental Advanced Superconducting Tokamak (EAST), ubicado en Hefei, provincia de Anhui, China, logró un hito significativo en el campo de la fusión nuclear. Mantuvieron un plasma a una temperatura sostenida superior a 100 millones de grados Celsius (180 millones de grados Fahrenheit) durante 1,066 segundos, estableciendo un nuevo récord mundial. El logro anterior del mismo dispositivo había sido de 403 segundos en abril de 2023.
Este avance es parte del esfuerzo continuo del proyecto EAST para desarrollar un reactor de fusión nuclear capaz de generar energía de manera continua y eficiente, replicando las condiciones del sol. Cabe resaltar que la temperatura en el núcleo del sol es de aproximadamente 15 millones de grados Celsius. Sin embargo, para lograr la fusión nuclear en la Tierra, se requieren temperaturas mucho más altas debido a la menor masa de nuestro planeta.
Las recientes actualizaciones en el EAST han sido clave para este logro. Particularmente, se ha mejorado el sistema de calefacción, duplicando su potencia de salida para operar a una capacidad equivalente a casi 70,000 microondas domésticas. Esta mejora ha permitido la operación estable y de alta eficiencia del dispositivo, lo que es crucial para mantener la circulación autosostenible del plasma, factor esencial para la generación continua de energía en futuros reactores de fusión.
China, además de sus desarrollos nacionales, es miembro del programa ITER (Reactor Experimental Termonuclear Internacional) desde 2006. Este mega proyecto, desarrollado en el sur de Francia, representa el mayor experimento de física de plasma de confinamiento magnético y el mayor reactor de fusión experimental del mundo. China es responsable del 9% de la construcción y operación de este proyecto internacional.
Lograr y superar los 1,000 segundos de sostenimiento del plasma es un paso clave en la investigación de la fusión nuclear, ya que demuestra la capacidad de simular el entorno operativo de una futura planta de energía de fusión. Este acontecimiento marca un avance significativo hacia la consecución de una fuente de energía limpia y prácticamente ilimitada, que podría transformar la producción de energía a nivel global. El Tokamak, la base del dispositivo EAST, fue inventado en la Unión Soviética en la década de 1950 y ha sido la tecnología preferida para los experimentos de fusión nuclear debido a su capacidad para confinar plasma a altas temperaturas mediante campos magnéticos.