Según un alto funcionario militar estadounidense, las fuerzas norcoreanas han sufrido "varios cientos" de bajas en la región de Kursk, donde han sido desplegadas para apoyar el esfuerzo bélico de Rusia. Este funcionario, que habló bajo condición de anonimato, detalló que las bajas incluyen tanto soldados heridos como muertos en combate (KIA). Se estima que Pyongyang ha enviado aproximadamente 11,000 soldados a esta zona, en un contexto en el que Ucrania ha recuperado territorio previamente ocupado.
El comandante en jefe de Ucrania, Oleksandr Syrsky, destacó que las tropas norcoreanas no son soldados experimentados, lo que podría justificar su alto número de bajas frente a las fuerzas ucranianas. Syrsky afirmó que Rusia ha utilizado a estas fuerzas en ofensivas intensivas en Kursk.
La presencia de tropas norcoreanas en Ucrania ha sido calificada como una internacionalización del conflicto por el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. La participación norcoreana está enmarcada en un pacto de defensa firmado entre Rusia y Corea del Norte en junio de 2024, el cual permite el despliegue de estas tropas con el objetivo de adquirir experiencia militar.
En respuesta a esta situación, Ucrania ha lanzado la campaña "Quiero Vivir", diseñada originalmente para facilitar la rendición de soldados rusos. Esta iniciativa ahora se extiende a soldados norcoreanos, ofreciéndoles una "vida mejor" a aquellos que se rindan. Los beneficios prometidos incluyen trato humano conforme a las Convenciones de Ginebra, alojamiento cómodo, comidas calientes y asistencia para comenzar una nueva vida lejos del régimen de Kim Jong-un. Los mensajes de la campaña se distribuyen a través de folletos y videos en coreano.
Hasta la fecha, más de 300 soldados rusos se han rendido bajo el programa "Quiero Vivir", y se han recibido más de 35,000 solicitudes de soldados que desean evitar ser parte del conflicto. La campaña incluye un video en coreano que anima a los soldados norcoreanos a aprovechar la oportunidad de escapar del régimen norcoreano.
Adicionalmente, se ha señalado que, aunque Rusia ofrece un pago mensual de 2,000 euros a cada soldado norcoreano, la mayor parte de este dinero probablemente es confiscada por la élite gobernante en Pyongyang, dejando a los soldados con escasos recursos económicos, lo que podría incrementar su disposición a rendirse bajo la oferta ucraniana. Las relaciones militares entre Corea del Norte y Rusia se han fortalecido significativamente desde la invasión de Ucrania en febrero de 2022, culminando en un acuerdo de defensa que permitió el despliegue de tropas norcoreanas en Ucrania en 2024.