La miopía, un trastorno del enfoque visual caracterizado por el alargamiento del ojo, está en preocupante aumento, según un artículo publicado Science Direct. Esta condición, que afecta la capacidad de ver objetos distantes con claridad, se prevé que impacte a la mitad de la población mundial para el año 2050, incrementando riesgos significativos para la salud visual global.
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El uso excesivo de pantallas y la disminución de la actividad al aire libre son señalados como factores clave en el aumento de la prevalencia de la miopía. Según los expertos, estos cambios en el estilo de vida están contribuyendo a un preocupante incremento de este trastorno en diversas regiones del mundo.
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Un dato alarmante proviene de los países asiáticos, donde aproximadamente el 80% de los niños que completan la educación secundaria presentan miopía. Dentro de este grupo, entre el 10% y el 20% son catalogados como muy miopes, una condición que incrementa el riesgo de desarrollar patologías oculares potencialmente cegadoras.
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En 2010, el error refractivo no corregido fue identificado como la causa más común de discapacidad visual a distancia y la segunda causa más frecuente de ceguera mundialmente. Desde entonces, las cifras han continuado en aumento, pasando de 1.4 mil millones de personas afectadas a una estimación de 4.7 mil millones para 2050.
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En España, las cifras también reflejan este preocupante aumento. En los niños de entre cinco y siete años, la prevalencia de la miopía es actualmente del 19%, pero se espera que esta cifra llegue al 30% en 2030. Expertos atribuyen este incremento a factores genéticos, ambientales y raciales, destacando la reducción del tiempo al aire libre y el aumento de las tareas que requieren visión cercana, especialmente en sistemas educativos de alta presión.
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Los especialistas recomiendan incrementar las actividades al aire libre y reducir las tareas de visión cercana como medidas preventivas esenciales para combatir este problema creciente que, de no ser abordado adecuadamente, pondrá en riesgo de ceguera a un porcentaje significativo de la población mundial.
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El fenómeno de la miopía no solo es un desafío para la salud visual, sino también una cuestión de salud pública que requiere atención y acción inmediata. La evidencia sugiere que las intervenciones deben centrarse en promover hábitos saludables de visión y en implementar políticas educativas y de salud que mitiguen este riesgo.
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El impacto potencial de la miopía en la salud visual mundial para 2050 subraya la necesidad urgente de medidas preventivas para abordar este problema. En resumen, la miopía está en camino de convertirse en una crisis global de salud visual si no se toman medidas correctivas y preventivas pertinentes, alertan los especialistas en la materia. En algunos países asiáticos, el 80% de los niños que terminan la educación secundaria tienen miopía, una cifra significativamente mayor comparada con el resto del mundo.