Jamie Dimon, director ejecutivo de JPMorgan Chase, expresó fuertes preocupaciones por los efectos económicos de los aranceles establecidos por Donald Trump, enfatizando que estas medidas podrían tener un impacto negativo en la economía de Estados Unidos. Los aranceles, anunciados el pasado 2 de abril de 2025, están diseñados para gravar productos importados, pero según Dimon, repercutirán también en el costo de bienes nacionales debido al aumento en los costos de insumos y la consecuente alza en la demanda de productos locales. Como resultado, los precios para los consumidores probablemente aumentarán.
En su carta anual a los accionistas, Dimon alertó que estos aranceles podrían detonar un incremento en la inflación. Además, destacó que los resultados inflacionarios podrían ser más persistentes de lo que se anticipa actualmente, lo cual mantendría las tasas de interés en niveles altos incluso si la economía entra en una desaceleración. A pesar de que no garantizó que los aranceles provocarán una recesión, sí subrayó que existe una mayor probabilidad de que ocurra, y que estas políticas ralentizarán notablemente el crecimiento económico del país.
Los mercados internacionales ya han mostrado una reacción negativa, experimentando caídas en los valores durante tres días consecutivos. Este contexto ha generado temores de una posible guerra comercial global y sus repercusiones en la economía estadounidense. Además, se estima que el impacto acumulativo de estos aranceles representa un costo aproximado de 3,800 dólares al año para el hogar promedio estadounidense.
Dimon también resaltó las numerosas incertidumbres que rodean la política arancelaria de la administración de Trump. Entre estas, incluyó posibles represalias por parte de otros países, efectos adversos en la confianza del consumidor y en las inversiones, así como tensiones potenciales en los flujos de capital y en el valor del dólar. Asimismo, advirtió sobre la fragmentación de las alianzas económicas internacionales de los Estados Unidos, lo cual podría debilitar la posición del país en el largo plazo.
Como parte de sus recomendaciones, el CEO de JPMorgan Chase enfatizó la necesidad de implementar programas complementarios que incluyan reentrenamiento laboral, asistencia financiera y estrategias de reubicación para los trabajadores afectados por el impacto del comercio.
La combinación de estos factores refleja el escepticismo de Jamie Dimon hacia el enfoque de los aranceles como herramienta de política económica, y llama la atención sobre las posibles consecuencias tanto inmediatas como de largo plazo que esta política podría generar.
El aumento de los aranceles y sus efectos económicos ha sido motivo de debate durante años, pero esta es una de las pocas veces en que un líder de la banca estadounidense como Jamie Dimon ha señalado directamente su preocupación sobre las consecuencias para las familias promedio y la economía nacional.