En 2016, Donald Trump pagó a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels $130,000 para que no revelara un supuesto encuentro sexual entre ambos. Este pago, realizado por su entonces abogado Michael Cohen, fue el centro de un juicio donde Trump fue condenado por 34 cargos de falsificación de registros comerciales.
A menos de un mes de las elecciones presidenciales de 2024, la situación ha dado un nuevo giro. Según informes de MSNBC, el equipo legal de Trump ofreció a Daniels un acuerdo financiero para que no haga declaraciones desfavorables sobre él. Esta oferta se produce mientras el expresidente espera su sentencia, programada para el 26 de noviembre de 2024, tras su condena en mayo del mismo año.
Los detalles del acuerdo revelan que los abogados de Trump propusieron reducir la cantidad que Daniels debía por honorarios legales en un caso de difamación a cambio de firmar un acuerdo de no divulgación (NDA). Inicialmente, Trump reclamaba $652,000, rediciendo posteriormente la oferta a $620,000. Al negarse Daniels, el monto se ajustó a $635,000 y finalmente se acordó un pago de $627,500 sin NDA.
Correspondencia entre los equipos legales de ambos lados mostró que Trump estaba dispuesto a aceptar menos dinero si Daniels se comprometía a no hacer declaraciones públicas o privadas sobre él. Según un abogado de Daniels, Trump y su equipo planeaban "lavar" el nuevo pago a través de la reducción de la deuda legal.
El portavoz de la campaña de Trump, Steven Cheung, alegó que los documentos relacionados con estas negociaciones fueron obtenidos a través de un ataque de piratería ilegal. Sin embargo, MSNBC asegura que los documentos fueron proporcionados directamente por el equipo legal de Daniels.
Este nuevo intento de acuerdo ocurre en un contexto en el que Trump ya enfrenta serias consecuencias legales por sus acciones pasadas relacionadas con los pagos a Daniels. La situación ha atraído un intenso escrutinio mediático y político, especialmente con las elecciones presidenciales próximas.
La controversia legal entre Trump y Daniels ha sido uno de los eventos más mediáticos de los últimos años, poniendo una vez más en el centro de atención las tácticas empleadas por Trump para manejar los escándalos. Con la sentencia del expresidente programada para noviembre y la proximidad de las elecciones, los analistas políticos observan de cerca cómo estos eventos influirán en el panorama electoral.
En resumen, este intento de acuerdo y el contexto legal que lo rodea representan desafíos significativos tanto para Trump como para sus aspiraciones políticas futuras.