En un pronunciamiento desde Francia, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, se refirió al reciente escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) durante la audiencia de imputación de cargos contra Olmedo López y Sneyder Pinilla, exdirectivos de la entidad. Durante su declaración, Petro fue claro al afirmar que no defenderá a ninguno de los implicados, aunque reconoció la posibilidad de que inocentes sean acusados en el proceso.

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Petro, al comparar la gravedad de los hechos de la UNGRD con el escándalo de Odebrecht, indicó que los incidentes en la UNGRD no eran siquiera "ni una uña" del caso Odebrecht, en el cual, según sus palabras, "casi todo está en la impunidad". El presidente hizo un llamado enfático a las autoridades para que realicen una investigación exhaustiva y que "caiga quien caiga", subrayando la importancia de que ningún culpable quede sin castigo.
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La Fiscalía General de la Nación dio a conocer que López y Pinilla se concertaron para repartir contratos a contratistas allegados a cambio de sobornos. Además, se reveló la participación de Carlos Ramón González en la orquestación de estos actos corruptos, y el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, fue mencionado en el proceso de coordinación de contratos.
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Petro hizo hincapié en que la justicia debe actuar con severidad en todos los casos de corrupción. Señaló que una actuación decidida y coherente en este tipo de casos podría generar una fuerza capaz de contribuir a la transformación del país.
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El presidente también se dirigió a la opinión pública, mencionando la necesidad de transparencia y responsabilidad en estos casos para asegurar que todos los culpables sean llevados ante la justicia y que el proceso se lleve a cabo de forma justa y rigurosa. El caso Odebrecht involucra una red de corrupción de al menos 12 países en América Latina y África, en la que se pagaron aproximadamente 788 millones de dólares en sobornos para asegurar contratos de obras públicas.