Corabastos, la mayor central de abastos de Colombia, juega un papel fundamental en la lucha contra el hambre y el desperdicio de alimentos en el país. Con un manejo diario de más de 30,000 toneladas de frutas, verduras y tubérculos, este importante centro de distribución dona al menos 12 toneladas de alimentos cada día al Banco de Alimentos de Bogotá. Estas donaciones contribuyen significativamente a combatir la inseguridad alimentaria en la capital colombiana, donde más del 24% de la población enfrenta esta problemática.
Desde hace nueve años, el Banco de Alimentos de Bogotá ha establecido una bodega en Corabastos. Un equipo dedicado de 12 personas selecciona cuidadosamente los alimentos en óptimas condiciones para su redistribución. Las donaciones incluyen una variedad de productos como papa, yuca, plátano y diversas frutas y verduras. Estos alimentos son luego entregados a más de 1,000 fundaciones que brindan apoyo a poblaciones vulnerables.
En lo que va del 2024, el Banco de Alimentos ha entregado más de 14,320,000 kilos de alimentos. Esta enorme cantidad de alimentos ha permitido servir aproximadamente 36,114,400 platos a los beneficiarios, desempeñando un papel crucial en la lucha contra la desnutrición y la pobreza alimentaria.
Además de su esfuerzo por redistribuir alimentos, Corabastos ha implementado un eficiente sistema de gestión de residuos. Un centro de clasificación de residuos opera las 24 horas del día, separando los desechos orgánicos de otros materiales como plásticos y cartones. El 85% de los residuos orgánicos se transforma en compost, el cual se vende a campesinos a un precio de 12,000 pesos por bulto (aproximadamente 3 dólares), promoviendo así la agricultura sostenible.
La problemática del desperdicio de alimentos es alarmante en Colombia, donde el 34% de los alimentos frescos se pierde. De esta cifra, el 62% corresponde a frutas y vegetales, y el 25% a raíces y tubérculos. La iniciativa de Corabastos no solo busca mitigar estos desperdicios, sino también reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, que representan entre el 8% y el 10% de las emisiones globales causadas por la descomposición de alimentos no consumidos.
Corabastos se ha comprometido con la reducción de desperdicios y el aprovechamiento máximo de los recursos disponibles. Las iniciativas de donación y compostaje no solo benefician a las comunidades locales, sino que también contribuyen a la sostenibilidad ambiental. El compost producido en Corabastos no solo es accesible a los agricultores locales, sino que también ha mejorado la calidad de los suelos en varias regiones, demostrando la eficacia del reciclaje de residuos orgánicos.