BMW anunció un recall de 1.5 millones de vehículos debido a un problema relacionado con el sistema de soporte de frenos electrónicos. Este fallo en particular podría afectar la presión necesaria para detener el vehículo, aunque, según la compañía, los frenos continúan funcionando. Los vehículos afectados incluyen modelos como el BMW X1, X2, X5, Mini Cooper, Countryman y el Rolls-Royce Spectre, todos producidos desde junio de 2022.
Las acciones de BMW cayeron aproximadamente un 11%, alcanzando un mínimo de cuatro años, en respuesta al anuncio del recall. Se estima que la medida costará aproximadamente €1,000 millones (£840 millones). La empresa anticipa que sus ganancias anuales serán considerablemente más bajas de lo esperado, con márgenes de beneficio proyectados en un 6% en lugar del 10% habitual.
De los 1.5 millones de vehículos afectados, aproximadamente 1.2 millones ya han sido entregados a clientes, y se podrán verificar remotamente mediante actualizaciones de software. Sin embargo, 320,000 vehículos nuevos experimentarán retrasos en su entrega. Los vehículos implicados fueron fabricados en plantas de BMW en Alemania, Reino Unido, Francia, Estados Unidos, China y Corea del Sur.
El proveedor de sistemas de frenos, Continental, estima que solo una pequeña proporción de sus sistemas necesitará ser reemplazada, con un costo de garantía en el rango de decenas de millones de euros. Este anuncio aumenta los desafíos actuales de la industria automotriz alemana, incluida la reciente noticia de Volkswagen sobre posibles cierres de fábricas.
En cuanto al índice bursátil FTSE 100 y la tasa de desempleo juvenil en el Reino Unido, no se han proporcionado detalles específicos sobre el rendimiento del índice ni cifras exactas sobre la tasa de desempleo juvenil, aunque estos temas continúan siendo áreas de discusión.