Ciencia

Descubren un “Tercer Estado” Entre la Vida y la Muerte con Potencial para la Medicina Regenerativa

Investigadores han identificado un "tercer estado" biológico en el que células de organismos muertos pueden reorganizarse y formar nuevas entidades multicelulares, lo que podría revolucionar los conceptos tradicionales de vida y muerte y abrir nuevas oportunidades en la medicina regenerativa.

Ciencia

Descubren un “Tercer Estado” Entre la Vida y la Muerte con Potencial para la Medicina Regenerativa

Investigadores han identificado un "tercer estado" biológico en el que células de organismos muertos pueden reorganizarse y formar nuevas entidades multicelulares, lo que podría revolucionar los conceptos tradicionales de vida y muerte y abrir nuevas oportunidades en la medicina regenerativa.

"Este descubrimiento desafía nuestra comprensión de la vida y la muerte, y ofrece un nuevo horizonte para la medicina regenerativa"

- Resaltó el equipo de investigación.

16/9/2024

En un destacado avance, estudios recientes han revelado un "tercer estado" biológico en el que células de organismos muertos pueden reorganizarse y formar nuevas entidades multicelulares. Este hallazgo cuestiona las nociones tradicionales de vida y muerte, y podría tener implicaciones significativas en la medicina regenerativa.

La investigación ha demostrado que ciertas células pueden transformarse en organismos multicelulares al recibir nutrientes, oxígeno y señales bioeléctricas. Un ejemplo notable es el de las células de piel de embriones de rana, que, incluso después de la muerte del organismo, pueden reorganizarse y formar xenobots. Estos xenobots se mueven y desempeñan funciones que van más allá de su rol biológico original.

Los xenobots, formados por células de piel de embriones de rana, utilizan cilios para navegar, una función diferente a la de sus contrapartes en embriones vivos, donde los cilios se encargan de mover moco. Además, los xenobots pueden replicarse físicamente sin necesidad de crecimiento, un proceso distinto a la replicación común.

Por otro lado, las células pulmonares humanas también muestran un comportamiento sorprendente. Estas células pueden autoensamblarse en organismos multicelulares conocidos como anthrobots, que tienen la capacidad de moverse y reparar células neuronales dañadas. Este fenómeno sugiere aplicaciones en el campo médico, como la administración de medicamentos sin desencadenar respuestas inmunitarias adversas, la disolución de placas arteriales en pacientes con aterosclerosis y la eliminación del exceso de moco en pacientes con fibrosis quística.

El tiempo de supervivencia celular postmortem varía entre diferentes tipos de células y especies animales. Por ejemplo, las células sanguíneas blancas humanas mueren entre 60 y 86 horas después de la muerte, mientras que las células musculares esqueléticas en ratones pueden regenerarse hasta 14 días postmortem. Los fibroblastos de ovejas y cabras pueden cultivarse hasta un mes después de la muerte. Estos tiempos de supervivencia están influenciados por la actividad metabólica, las condiciones ambientales y técnicas de preservación como la criopreservación.

Estos organismos multicelulares tienen una vida útil limitada de cuatro a seis semanas, actuando como un "interruptor de muerte" para prevenir el crecimiento celular invasivo. Sin embargo, persisten vacíos en el conocimiento sobre cómo las células y tejidos responden a la muerte del organismo, vacíos que, de comprenderse mejor, podrían transformar la medicina regenerativa y redefinir el concepto de muerte legal.

Un artículo reciente publicado en la revista Physiology (Vol. 39, Issue 5, Septiembre 2024, Páginas 313-323) ha discutido estos hallazgos en profundidad. El estudio se enfoca en los mecanismos de supervivencia celular influenciados por el metabolismo y el entorno, ofreciendo implicaciones extensas para la biología y la medicina.

El descubrimiento de este "tercer estado" entre vida y muerte representa una apertura a nuevas posibilidades en el ámbito médico, llevando el entendimiento de la biología celular a un nivel más avanzado y desafiando conceptos previamente establecidos sobre la naturaleza de la vida y la muerte.

Algo Curioso

"Este descubrimiento desafía nuestra comprensión de la vida y la muerte, y ofrece un nuevo horizonte para la medicina regenerativa"

- Resaltó el equipo de investigación.

Sep 16, 2024
Colglobal News

En un destacado avance, estudios recientes han revelado un "tercer estado" biológico en el que células de organismos muertos pueden reorganizarse y formar nuevas entidades multicelulares. Este hallazgo cuestiona las nociones tradicionales de vida y muerte, y podría tener implicaciones significativas en la medicina regenerativa.

La investigación ha demostrado que ciertas células pueden transformarse en organismos multicelulares al recibir nutrientes, oxígeno y señales bioeléctricas. Un ejemplo notable es el de las células de piel de embriones de rana, que, incluso después de la muerte del organismo, pueden reorganizarse y formar xenobots. Estos xenobots se mueven y desempeñan funciones que van más allá de su rol biológico original.

Los xenobots, formados por células de piel de embriones de rana, utilizan cilios para navegar, una función diferente a la de sus contrapartes en embriones vivos, donde los cilios se encargan de mover moco. Además, los xenobots pueden replicarse físicamente sin necesidad de crecimiento, un proceso distinto a la replicación común.

Por otro lado, las células pulmonares humanas también muestran un comportamiento sorprendente. Estas células pueden autoensamblarse en organismos multicelulares conocidos como anthrobots, que tienen la capacidad de moverse y reparar células neuronales dañadas. Este fenómeno sugiere aplicaciones en el campo médico, como la administración de medicamentos sin desencadenar respuestas inmunitarias adversas, la disolución de placas arteriales en pacientes con aterosclerosis y la eliminación del exceso de moco en pacientes con fibrosis quística.

El tiempo de supervivencia celular postmortem varía entre diferentes tipos de células y especies animales. Por ejemplo, las células sanguíneas blancas humanas mueren entre 60 y 86 horas después de la muerte, mientras que las células musculares esqueléticas en ratones pueden regenerarse hasta 14 días postmortem. Los fibroblastos de ovejas y cabras pueden cultivarse hasta un mes después de la muerte. Estos tiempos de supervivencia están influenciados por la actividad metabólica, las condiciones ambientales y técnicas de preservación como la criopreservación.

Estos organismos multicelulares tienen una vida útil limitada de cuatro a seis semanas, actuando como un "interruptor de muerte" para prevenir el crecimiento celular invasivo. Sin embargo, persisten vacíos en el conocimiento sobre cómo las células y tejidos responden a la muerte del organismo, vacíos que, de comprenderse mejor, podrían transformar la medicina regenerativa y redefinir el concepto de muerte legal.

Un artículo reciente publicado en la revista Physiology (Vol. 39, Issue 5, Septiembre 2024, Páginas 313-323) ha discutido estos hallazgos en profundidad. El estudio se enfoca en los mecanismos de supervivencia celular influenciados por el metabolismo y el entorno, ofreciendo implicaciones extensas para la biología y la medicina.

El descubrimiento de este "tercer estado" entre vida y muerte representa una apertura a nuevas posibilidades en el ámbito médico, llevando el entendimiento de la biología celular a un nivel más avanzado y desafiando conceptos previamente establecidos sobre la naturaleza de la vida y la muerte.

En un destacado avance, estudios recientes han revelado un "tercer estado" biológico en el que células de organismos muertos pueden reorganizarse y formar nuevas entidades multicelulares. Este hallazgo cuestiona las nociones tradicionales de vida y muerte, y podría tener implicaciones significativas en la medicina regenerativa.

La investigación ha demostrado que ciertas células pueden transformarse en organismos multicelulares al recibir nutrientes, oxígeno y señales bioeléctricas. Un ejemplo notable es el de las células de piel de embriones de rana, que, incluso después de la muerte del organismo, pueden reorganizarse y formar xenobots. Estos xenobots se mueven y desempeñan funciones que van más allá de su rol biológico original.

Los xenobots, formados por células de piel de embriones de rana, utilizan cilios para navegar, una función diferente a la de sus contrapartes en embriones vivos, donde los cilios se encargan de mover moco. Además, los xenobots pueden replicarse físicamente sin necesidad de crecimiento, un proceso distinto a la replicación común.

Por otro lado, las células pulmonares humanas también muestran un comportamiento sorprendente. Estas células pueden autoensamblarse en organismos multicelulares conocidos como anthrobots, que tienen la capacidad de moverse y reparar células neuronales dañadas. Este fenómeno sugiere aplicaciones en el campo médico, como la administración de medicamentos sin desencadenar respuestas inmunitarias adversas, la disolución de placas arteriales en pacientes con aterosclerosis y la eliminación del exceso de moco en pacientes con fibrosis quística.

El tiempo de supervivencia celular postmortem varía entre diferentes tipos de células y especies animales. Por ejemplo, las células sanguíneas blancas humanas mueren entre 60 y 86 horas después de la muerte, mientras que las células musculares esqueléticas en ratones pueden regenerarse hasta 14 días postmortem. Los fibroblastos de ovejas y cabras pueden cultivarse hasta un mes después de la muerte. Estos tiempos de supervivencia están influenciados por la actividad metabólica, las condiciones ambientales y técnicas de preservación como la criopreservación.

Estos organismos multicelulares tienen una vida útil limitada de cuatro a seis semanas, actuando como un "interruptor de muerte" para prevenir el crecimiento celular invasivo. Sin embargo, persisten vacíos en el conocimiento sobre cómo las células y tejidos responden a la muerte del organismo, vacíos que, de comprenderse mejor, podrían transformar la medicina regenerativa y redefinir el concepto de muerte legal.

Un artículo reciente publicado en la revista Physiology (Vol. 39, Issue 5, Septiembre 2024, Páginas 313-323) ha discutido estos hallazgos en profundidad. El estudio se enfoca en los mecanismos de supervivencia celular influenciados por el metabolismo y el entorno, ofreciendo implicaciones extensas para la biología y la medicina.

El descubrimiento de este "tercer estado" entre vida y muerte representa una apertura a nuevas posibilidades en el ámbito médico, llevando el entendimiento de la biología celular a un nivel más avanzado y desafiando conceptos previamente establecidos sobre la naturaleza de la vida y la muerte.

Algo Curioso

PODRÍA INTERESARTE
 

No tienes acceso

Necesitas una membresía para acceder al contenido de este sitio.
Por favor Regístrate o Ingresa