El Red Bull Bike Express es una ambiciosa hazaña que tardó aproximadamente 1.5 años en realizarse desde su concepción hasta su ejecución. Este tiempo se dividió entre un año de pruebas y otro de diseño y construcción de la pista. El montaje de la misma fue llevado a cabo en tan solo tres semanas por un equipo de hábiles constructores polacos.
El tren utilizado en el proyecto es un modelo de alta tecnología capaz de mantener una velocidad constante y lenta, lo cual permitió la realización de trucos mientras se cargaba mercancía sin necesidad de detenerse. La pista fue montada sobre 10 vagones, proporcionando una superficie única para la ejecución de las maniobras.
Dawid Godziek llevó a cabo varias maniobras complejas, destacando un flat-drop backflip nunca antes intentado que aterrizó en la base de unas escaleras en el último vagón. La naturaleza en movimiento del tren añadió desafíos únicos, como la falta de resistencia del aire, que normalmente ayuda a estabilizar a los ciclistas. Godziek describió la experiencia como una mezcla de mareo por movimiento, mareo aéreo y mal de altura debido a las dinámicas inusuales de montar en una plataforma en movimiento.
La estrechez de la pista aumentó los riesgos de la actuación, ya que cualquier error podría haber resultado en una caída desde el tren, subrayando los altos riesgos involucrados en la presentación.
Cuando habló sobre el proyecto, Godziek reflejó el nivel de precisión requerido: "Cuando vi el tren en persona, noté que las escaleras eran más altas de lo que pensaba. El impacto al aterrizar en el plano fue tan fuerte que todas mis articulaciones se vieron afectadas".
Esta hazaña de Dawid Godziek no solo muestra sus habilidades excepcionales, sino que también empuja los límites de lo que es posible en el BMX freestyle. La exitosa ejecución de este proyecto estableció un nuevo estándar en el deporte, fusionando creatividad, ingeniería y atletismo de una manera sin precedentes.