“EL PODER DEL DINERO”: PARTE IV - LEYES 10ª, 11ª y 12ª

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INTRODUCCIÓN
Uno de los principales objetivos que buscan los seres humanos es alcanzar la independencia financiera. Debemos encontrar el punto de equilibrio donde contemos con el dinero suficiente como para no tener que preocuparnos más por aspectos económicos. La buena noticia es que la independencia financiera es más fácil de lograr hoy de lo que ha sido en toda la historia de la humanidad.

A pesar de las dificultades económicas que puedan afectar a ciertas regiones del planeta y a las fluctuaciones de los mercados internacionales, lo cierto es que la globalización y las nuevas tecnologías han logrado que hoy por hoy, las oportunidades existentes para desarrollar riqueza y abundancia en nuestras vidas se pueden encontrar en cualquier lugar del mundo.

Independientemente de lo que el más pesimista de los analistas financieros pueda pensar, sin importar dónde estemos viviendo, lo más probable es que en este momento nos encontramos rodeados de más riqueza y opulencia que la que jamás vimos antes. Su objetivo debe ser participar plenamente en lo que muchas personas están empezando a llamar la “Edad Dorada” de la humanidad.

El dinero posee una energía propia y, por lo general, es atraído por quienes lo tratan bien. Éste tiende a fluir hacia aquellos que pueden usarlo de la manera más productiva para generar bienes y servicios valiosos. De igual forma, suele circular hacia aquellas personas que pueden invertirlo para crear empleo y oportunidades que beneficien a otros seres humanos. Al mismo tiempo, el dinero se aleja o tiende a eludir a quienes lo usan con una mentalidad de pobreza o lo gastan en formas poco productivas.

Así que su trabajo es adquirir tanto como sea posible, de forma honesta, y luego utilizarlo para mejorar su calidad de vida y la de sus seres queridos. Para alcanzar este objetivo contamos con 21 leyes absolutamente inquebrantables del dinero, éstas le permitirán cosechar grandes riquezas y desarrollar la mentalidad de abundancia que atraerá el dinero hacia usted.

En su libro, "21 leyes absolutamente inquebrantables del dinero", Brian Tracy (Copyright © 2010), nos ofrece una guía práctica y profunda para entender el funcionamiento del dinero y cómo podemos aprovecharlo para alcanzar la prosperidad financiera. En este ensayo, basados en el libro de Tracy, exploraremos cómo aplicar estas leyes para ahorrar más y hacer producir el dinero en tiempos de crisis.

DESARROLLO

LEY 10ª: LA LEY DE LA PERSPECTIVA DEL TIEMPO
“Las personas más exitosas en cualquier sociedad son aquellas que toman decisiones con mucho tiempo de anticipación”.

Mientras más alto se encuentre una persona en la pirámide socioeconómica, más amplia será su perspectiva u horizonte del tiempo. En otras palabras, podrá ver más adelante en su futuro. Las personas que están en los niveles sociales y económicos más altos toman decisiones y realizan sacrificios cuyos resultados no se pueden ver por muchos años, o tal vez ni siquiera en su vida sino en la de sus herederos.

Quienes tienen perspectivas a largo plazo en el tiempo están dispuestos a pagar el precio del éxito por un largo tiempo antes de alcanzarlo. Ellos toman el tiempo suficiente para pensar y medir el alcance y las consecuencias de sus elecciones y decisiones financieras en términos de lo que pueden significar en cinco, diez, quince e incluso veinte años.

La gente que está en los niveles socioeconómicos más bajos tiene una perspectiva del tiempo a más corto plazo. Se enfocan principalmente en la gratificación inmediata que puedan tener sus decisiones y casi siempre caen presas de comportamientos financieros que están prácticamente garantizados para llevarlos a crear deudas, a mantenerlos en la pobreza y a exponerlos a problemas financieros en un largo plazo.

Usted empieza a escalar social y financieramente desde el día que decide pensar en lo que está haciendo, en términos de las posibles consecuencias de sus acciones a largo plazo. Cuando empieza a proyectarse a largo plazo, a organizar su vida financiera y las prioridades, con sus ambiciones y objetivos futuros en mente, la calidad de sus decisiones mejora y su vida empieza a prosperar casi inmediatamente.

La primera conclusión de la Ley de la perspectiva de tiempo dice que “La gratificación a largo plazo es la clave para lograr el éxito financiero”.

Su habilidad para practicar autocontrol y para sacrificar decisiones a corto plazo, de manera que pueda obtener beneficios más grandes a largo plazo, es el punto de partida para desarrollar una perspectiva a largo plazo. Esta actitud es esencial para obtener logros financieros de cualquier tipo.

La segunda conclusión de esta ley es que “La autodisciplina es la clave del éxito financiero”.

La autodisciplina fue definida por Elbert Hubbard hace mucho tiempo como “La habilidad de obligarse a usted mismo a hacer lo que tenga que hacer, cuando lo deba hacer, así quiera o no”. La habilidad para disciplinarse a pagar el precio del éxito antes de tiempo, y continuar pagándolo hasta lograr el objetivo que se ha propuesto, es la marca verdadera del ganador.

La tercera conclusión de esta ley es que “El sacrificio a corto plazo es el precio que debe pagar su seguridad en el largo plazo”.

La palabra clave aquí es “sacrificio”. Cuando resiste la tentación de realizar actividades divertidas o fáciles o que prometen gratificaciones inmediatas y, en vez de esto, se disciplina para alcanzar aquellas que son difíciles y necesarias, puede desarrollar en usted mismo el tipo de carácter que prácticamente le garantiza una vida mejor en el futuro.

Cuando invierte continuamente su tiempo y dinero en mejorarse así mismo antes de pensar en usarlo para diversiones pasajeras, socializar o ver televisión, está prácticamente garantizando su futuro.

PLAN DE ACCIÓN

  1. ¿Cuáles son cinco de sus metas más importantes para los próximos veinte años?
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  2. ¿Había pensado en esto antes? ¿Sí o No? ¿Por qué?
  3. ¿Planifica sus actividades y metas con suficiente anticipación?

LEY 11ª: LA LEY DEL AHORRO
“La libertad financiera llega a la persona que ahorra el diez por ciento o más de su sueldo a lo largo de su vida”.

Una de las decisiones más inteligentes que usted puede tomar para atraer dinero hacia usted es desarrollar el hábito de ahorrar parte de su sueldo. De cada cheque que reciba, ahorre por lo menos un 10%. Individuos, familias e incluso sociedades son estables y prósperas dependiendo del grado de las tasas de ahorro. Hoy en día, el ahorro es una pieza clave para garantizar nuestra seguridad financiera y las posibilidades que pueda ofrecernos el mañana.

La primera conclusión de la Ley del ahorro viene del libro El hombre más rico de Babilonia, de George Clason, y dice que “usted siempre debe pagarse a usted mismo primero”.

Empiece hoy mismo a guardar el diez por ciento de su sueldo, y no lo toque. Éste es su ahorro para acumulación financiera a largo plazo y nunca lo use para otra razón que no sea asegurar su futuro financiero. El asunto admirable es que cuando se paga a usted mismo primero, y se obliga a vivir con el otro noventa por ciento, se acostumbra a eso con rapidez.

Los seres humanos somos criaturas de hábitos. Cuando guarda regularmente el diez por ciento de su sueldo, en poco tiempo se sentirá cómodo viviendo con el noventa por ciento restante. Muchas personas empiezan ahorrando el diez por ciento de su sueldo, y luego aumentan al quince y veinte por ciento más. Sus vidas financieras cambian dramáticamente como consecuencia de ese hábito, y de esa misma manera también usted puede cambiar la suya.

La segunda conclusión de la Ley del ahorro dice que “debemos aprovechar los beneficios que nos puedan ofrecer ciertos planes de inversiones”.

Uno de nuestros mayores objetivos financieros debe ser el proteger el dinero que duramente hemos ganado y que hemos ahorrado, del pago excesivo de impuestos. Todos debemos hacerlo. Sin embargo, muchas personas pagan más impuestos de lo que deberían por el desconocimiento de las leyes que afectan su dinero.

Y aunque esto es algo que varía mucho de país a país, lo cierto es que la gran mayoría de las economías ofrecen vehículos financieros que les permiten a las personas minimizar el pago de impuestos e intereses, garantizando así un ahorro mucho más efectivo.

Invierta en planes de pensiones o retiro de la compañía para la cual usted trabaje. Esto, por lo general, trae grandes beneficios. Consulte a un planificador financiero o asesor de inversiones, ya que hay inversiones que son mucho más rentables que otras. No obstante, tenga siempre presente que usted es el único responsable de salvaguardar su dinero.

Empiece a guardar desde hoy el diez por ciento de sus ingresos. Abra una cuenta especial con este propósito y trate sus depósitos con el mismo respeto con el que trata sus pagos de arriendo o hipoteca cada mes. Si debe cubrir muchas deudas y considera que le es imposible ahorrar un 10% de sus ingresos, comience con el 1% y viva con el otro 99%, y cuando se sienta cómodo, suba el ahorro al dos por ciento. A lo largo del tiempo, suba la tasa a diez, quince e incluso a veinte por ciento de su sueldo.

PLAN DE ACCIÓN

  1. ¿Está usted satisfecho con la cantidad de dinero que ha podido ahorrar en los últimos cinco años?
  2. ¿Cuáles son las tres razones más comunes que le impiden ahorrar?
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  3. ¿Cree usted que le sería posible ahorrar un 10% de su salario empezando hoy mismo? ¿Sí o no? ¿Por qué?

LEY 12ª: LA LEY DE LA CONSERVACIÓN
“No es cuánto gana, sino con cuánto le queda, lo que determina su futuro financiero”.

Un sinnúmero de personas gana enormes cantidades de dinero durante el curso de su vida laboral. A veces, durante períodos de riqueza, ganan más dinero de lo que jamás pensaron que fuera posible. No obstante, la medida verdadera de qué tan bien le está yendo es cuánto dinero le queda al final del día. En otras palabras, cuánto dinero puede ahorrar del total de sus ingresos.

La gente exitosa suele ser muy rigurosa en lo referente al ahorro, o al pago de sus deudas o sus inversiones durante tiempos prósperos, sólo porque desean tener reservas cuando las circunstancias económicas sean menos favorables.

Calcule su patrimonio personal a partir de hoy. Haga una lista de sus activos y asígneles un valor en dinero de acuerdo con la cantidad que podría percibir por ellos si los tuviera que cambiar rápidamente por dinero. Sume todas sus cuentas, sus balances de tarjetas de crédito e hipotecas y réstelos de sus activos para saber cuánto tiene en dinero neto hoy en día.

Ahora, divídalo por el número de años que lleva trabajando. El resultado es la cantidad neta que ha ganado cada año después de pagar todos los costos de vida. ¿Está contento con eso? Si no lo está, haga algo al respecto.

PLAN DE ACCIÓN

  1. ¿Cuenta usted con un presupuesto de gastos? ¿Sí o no? ¿Por qué?
  2. ¿Conoce usted cuál es el monto de su patrimonio personal? ¿Sí o no? ¿Por qué?
  3. ¿Cuáles gastos podría usted comenzar a eliminar hoy mismo para poder ahorrar más? ¡Sea específico!
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CONCLUSIONES
En conclusión, las 21 leyes de Brian Tracy nos ofrecen una guía práctica y profunda para entender el funcionamiento del dinero y cómo podemos aprovecharlo para alcanzar la prosperidad financiera.

Al aplicar estas leyes, podemos ahorrar más, hacer producir el dinero y prosperar en tiempos de crisis. Recuerda que la prosperidad financiera no se logra solo con la planificación, sino también con la acción, la focalización, la diversificación, la educación y la persistencia.

¡Manos a la obra!

Fin de la PARTE III - LEYES 10ª, 11ª y 12ª
Rafael Quiceno Pulido
Domingo 1 de marzo de 2025
Santiago de Chile
Columna de Opinión para Colglobal News

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