Las elecciones al Parlamento Europeo de 2024 han resultado en un fortalecimiento significativo de los partidos de extrema derecha en varios países. En Francia, el Rally Nacional (RN) de Marine Le Pen obtuvo un histórico 32% de los votos, superando a los aliados del presidente Emmanuel Macron, que lograron aproximadamente un 15%. Este resultado llevó a Macron a anunciar la disolución de la Asamblea Nacional y la convocatoria a elecciones legislativas anticipadas, con la primera vuelta programada para el 30 de junio y la segunda para el 7 de julio.
En Alemania, el partido Alternativa para Alemania (AfD) avanzó significativamente, asegurando el segundo lugar con un 16,5% de los votos. En Austria, el Partido de la Libertad se proyecta como el principal ganador con un 27% de los votos. En los Países Bajos, el Partido por la Libertad, liderado por Geert Wilders, obtuvo un 17,7% de los votos, quedando cerca de una alianza de izquierda-ecologista.
A pesar de los avances de la extrema derecha, se espera que los partidos pro-europeos mantengan una mayoría en el Parlamento Europeo. No obstante, esta mayoría reducida podría dificultar la aprobación de leyes ambiciosas, especialmente en áreas como la acción climática. Estos resultados también podrían complicar la candidatura de Ursula von der Leyen para un segundo mandato como presidenta de la Comisión Europea.
La decisión de Macron de disolver el parlamento francés ha tenido una recepción mixta. Algunos críticos lo ven como un movimiento arriesgado y potencialmente desestabilizador, mientras que otros lo consideran un paso necesario para enfrentar el cambiante panorama político en Francia y Europa. Las próximas elecciones legislativas en Francia serán cruciales para determinar la dirección futura del gobierno y sus políticas.
Las elecciones europeas de 2024 han marcado el inicio de una etapa de realineamiento político y maniobras estratégicas, ya que los partidos de todo el espectro político intentan adaptarse al auge de la extrema derecha y a los desafíos que enfrenta el proyecto europeo. Las dinámicas políticas en Europa están cambiando, y las respuestas proactivas son esenciales para abordar las preocupaciones y aspiraciones de los votantes en todo el continente.