El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, reveló el 12 de noviembre de 2024, la creación del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), una entidad que, aunque no es una agencia oficial del gobierno, proporcionará asesoramiento externo y trabajará en colaboración con la Oficina de Administración y Presupuesto (OMB) para llevar a cabo reformas estructurales significativas en el gobierno federal. Los elegidos para liderar esta iniciativa son Elon Musk, conocido por su papel en Tesla y SpaceX, y Vivek Ramaswamy, un empresario biotecnológico y ex candidato presidencial republicano.
El objetivo principal del DOGE es desmantelar la burocracia gubernamental, reducir regulaciones excesivas, recortar gastos innecesarios y reestructurar diversas agencias federales. En el contexto financiero, este nuevo departamento buscará abordar los 6.5 billones de dólares del gasto anual del gobierno, con Musk proponiendo una reducción de 2 billones de dólares, aproximadamente un tercio del presupuesto federal. Se espera que el departamento complete sus labores para el 4 de julio de 2026, fecha que coincidirá con el 250 aniversario de la Declaración de Independencia.
En su compromiso con la transparencia, Elon Musk ha prometido documentar todas las acciones del DOGE en línea, permitiendo al público expresar sus opiniones sobre los recortes propuestos y asegurando un proceso abierto.
En paralelo a estos nombramientos, Trump también designó a otras figuras clave para su administración. Pete Hegseth, presentador de Fox News y veterano militar, fue nombrado Secretario de Defensa. John Ratcliffe asumirá el cargo de Director de la CIA, Kristi Noem será la Secretaria de Seguridad Nacional y Elise Stefanik ocupará el puesto de Embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas.
La decisión no ha estado exenta de críticas. La organización Public Citizen ha expresado su preocupación por la falta de experiencia gubernamental de Musk y los posibles conflictos de interés derivados de sus negocios. Además, el diseño del DOGE plantea interrogantes sobre la rendición de cuentas y los estándares éticos, ya que sus líderes no serán empleados federales formales y pueden no estar sujetos a los mismos requisitos de divulgación que los funcionarios del gobierno.
Desde la victoria electoral de Trump, la criptomoneda Dogecoin ha visto duplicar su valor, reflejando el optimismo del mercado en un entorno regulador favorable bajo su administración. Las acciones de Tesla también han experimentado un incremento del 30%.
Estas decisiones reflejan un giro significativo en la estrategia de gobernanza de Trump, que ahora apuesta por un modelo de eficiencia empresarial para reducir el tamaño y alcance de las operaciones federales. El nombre del Departamento de Eficiencia Gubernamental, DOGE, es un guiño a la criptomoneda favorita de Elon Musk, Dogecoin.