En un sorpresivo y controvertido anuncio, el Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, despidió al Ministro de Defensa, Yoav Gallant, el 5 de noviembre de 2024. El despido se produjo en medio de un conflicto militar en expansión que involucra a Israel en frentes como Gaza y Líbano. Esta destitución ha catalizado una ola de protestas en todo el país, con miles de manifestantes tomando las calles y bloqueando carreteras en Tel Aviv y otras grandes ciudades para mostrar su descontento.
Las razones para la destitución de Gallant incluyen una "crisis de confianza" y "gaps significativos" en la gestión de la guerra, según Netanyahu. Aunque al principio del conflicto su relación fue fructífera, esta se deterioró por diferencias estratégicas críticas. Gallant abogó por priorizar un acuerdo de liberación de rehenes con Hamas, mientras Netanyahu favorecía una presión militar continuada.
Gallant había adoptado una postura enérgica en asuntos clave como la oposición a las exenciones de servicio militar para hombres ultraortodoxos, que consideraba una cuestión de equidad y seguridad. Además, insistió en la formación de una comisión oficial para investigar los fracasos políticos y de seguridad que permitieron el ataque del 7 de octubre de 2023 por parte de Hamas, un suceso que dejó 1,200 israelíes fallecidos. En ese ataque, aproximadamente 250 israelíes fueron secuestrados, de los cuales alrededor de 100 permanecen cautivos y solo 65 están vivos.
La remoción de Gallant inmediatamente condujo a una crítica severa de parte de líderes de la oposición, quienes la calificaron de "locura" y señalaron que esto era un acto desesperado de supervivencia política de Netanyahu. El presidente Isaac Herzog también cuestionó la decisión, resaltando que no era lo que el país necesitaba en un momento tan delicado.
La situación en el terreno es alarmante. Desde el inicio de la guerra, más de 42,000 palestinos han muerto en Gaza. Simultáneamente, las tropas israelíes enfrentan una invasión terrestre en Líbano contra Hezbollah, agravando aún más el conflicto regional.
Netanyahu nombró a Israel Katz como el nuevo Ministro de Defensa. Katz, actual Ministro de Relaciones Exteriores y leal a Netanyahu, tiene una vasta experiencia política pero carece de experiencia directa en asuntos militares.
El despido de Gallant se ha producido paralelamente a las elecciones presidenciales en Estados Unidos, lo que algunos analistas sugieren pudo influir en el momento de la decisión. Aunque la Casa Blanca no comentó sobre la destitución, reconoció a Gallant como un colaborador crucial en la defensa de Israel.
El conflicto político interno se intensifica mientras Netanyahu enfrenta la presión de aliados de extrema derecha que exigen mantener las exenciones del servicio militar para los ultraortodoxos, una medida que Gallant había criticado vehementemente.