El informe detallado presentado por la Confederación Sindical Internacional (ITUC) el 23 de septiembre de 2024 denuncia que algunas de las corporaciones más influyentes del mundo, como Amazon, Tesla y Meta, están involucradas en actividades que socavan la democracia global y los derechos humanos. Estas empresas han sido señaladas por financiar movimientos políticos de extrema derecha, contribuir a la crisis climática y cometer violaciones de derechos laborales y humanos.

Amazon, el quinto mayor empleador del mundo y el más grande minorista en línea y proveedor de servicios en la nube, enfrenta múltiples acusaciones de destructoras de sindicatos y prácticas de bajos salarios en diversos continentes. También se menciona que la compañía tiene altas tasas de lesiones en Estados Unidos y ha intentado desafiar la constitucionalidad de la Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB). En Canadá, ha intentado revertir leyes laborales y sus cabilderos fueron prohibidos en el Parlamento Europeo por rehusarse a asistir a audiencias sobre violaciones laborales. Además, Amazon ha financiado grupos políticos de extrema derecha que buscan socavar los derechos de las mujeres y la legislación antimonopolio.

Tesla ha sido señalada por su oposición a los sindicatos en Estados Unidos, Alemania y Suecia, y por cometer violaciones de derechos humanos en sus cadenas de suministro. El director general de Tesla, Elon Musk, ha mostrado apoyo a líderes políticos como Donald Trump en Estados Unidos, Javier Milei en Argentina y Narendra Modi en India.

Meta es acusada de permitir y facilitar propaganda de extrema derecha en sus plataformas. La empresa también ha realizado costosos esfuerzos de cabildeo en contra de leyes de privacidad de datos y ha tomado represalias contra medidas regulatorias en Canadá.

Glencore, la mayor empresa minera por ingresos, ha financiado campañas contra comunidades indígenas y activistas, mientras que Blackstone, una firma de capital privado, ha gastado decenas de millones de dólares para apoyar a políticos que prometen eliminar regulaciones.

Vanguard y ExxonMobil también han sido mencionadas en el informe. Vanguard fue acusada de financiar corporaciones consideradas antidemocráticas, mientras que ExxonMobil ha invertido en investigaciones contra la ciencia climática y ha realizado un cabildeo agresivo contra regulaciones ambientales.

El informe subraya que incluso en democracias robustas, las demandas de los trabajadores son abrumadas por las operaciones de cabildeo corporativo. Todd Brogan, director de campañas de la ITUC afirmó: "El poder corporativo está desplazando la agenda democrática; los trabajadores deben estar organizados para contrarrestar esta influencia." La ITUC, que representa a 191 millones de trabajadores en 169 países y territorios, aboga por un tratado internacional vinculante que responsabilice a las corporaciones transnacionales bajo leyes internacionales de derechos humanos.

Se espera que cerca de 4 mil millones de personas participen en elecciones en 2024, lo que pone de relieve la urgencia de establecer controles más estrictos sobre la influencia corporativa en la política mundial y la necesidad de salvaguardar los derechos laborales y humanos.